¿Son truenos eso que se oye en la distancia? Ah no, ¡es la presentación de una nueva carta de Hearthstone: Heroes of Warcraft! El incondicional Elemental de tierra retumba hacia el campo de batalla en todo su pétreo esplendor.
Elemental de tierra Provocar. Sobrecarga: (3)Es duro como una piedra, literalmente.
El Elemental de tierra es una verdadera gema entre tanta cartita suave y blandengue, con sus 7 de ataque y 8 de salud por tan solo 5 de maná. Su habilidad de Provocar protegerá a tu héroe del más duro de los golpes. Pero… ¿cómo hemos equilibrado a este poderoso aliado? Su habilidad de Sobrecarga estipula que tendrás menos maná para gastar en tu siguiente turno. De modo que si juegas el Elemental en el 5º turno, solo tendrás 3 de maná para gastar en el turno 6. ¡No subestimes el poder de una buena pedrada a tiempo!
Podría hacer esto toooodo el día.
Espíritu ancestral Escoge a un esbirro. Cuando sea destruido, devuélvelo al campo de batalla.Si un Elemental de tierra muere… ¿tengo que enterrarlo?
La penalización de Sobrecarga solo se tiene en cuenta cuando juegas el Elemental desde tu mano, de modo que es rentable combinarlo con el Espíritu ancestral para utilizar su esplendorosa habilidad para contrarrestar la penalización. Una piedra que rueda no acumula musgo, pero este rocoso guardián sí acumulará un gran número de enemigos destruidos. Con esta combinación puedes obtener triunfos tan aplastantes como un deslave…
En serio. Todo el día.
Los chamanes tienen un enorme poder a su disposición, de modo que no será raro invocar poderosos elementales y descargas de rayos de forma habitual.
Ah, aquí sigues… Ya que has tenido tanta paciencia con mis ridículas bromas sobre piedras, te regalo una última sugerencia:
Sylvanas Brisaveloz Último aliento: Toma control de un esbirro aleatorio de tu enemigo.Ha sido un camino rocambolesco para la reina alma en pena.
Sylvanas Brisaveloz, la reina alma en pena, también funciona muy bien con Espíritu ancestral por su habilidad de Último aliento. Al morir Sylvanas, roba un esbirro aleatorio de tu oponente. Puedes resucitarla con Espíritu ancestral y volver a hacerlo… pronto los esbirros de tus adversarios gritarán: “¡por los renegados!”.
Que no pare el rock, queridos hearthstonianos.